
Dentro de su amplia oferta de memoria RAM, OCZ posee su línea Flex la cual es orientada netamente a personas que requieren alto rendimiento y alta velocidad, pues según OCZ son “las memorias más rápidas del mundo”. Con este cartel de presentación tenemos ante nuestros ojos a las Flex XLC, sigla que significa Xtreme Liquid Convection, un sistema de disipador que mediante la mezcla de Aluminio, Cobre y Agua teóricamente mejora la refrigeración de nuestros chips de memoria, con lo que mejoraría con ello la performance y el overclock.

Luego de esta ultra compacta explicación pasemos a ver unas cuantas fotografías antes de sentarnos en el laboratorio de pruebas.
El empaque es el clásico (y detestable) empaque tipo blíster, ideal para vitrinas pero no tan ideal para abrirlo fácil.
Luciendo sus gigantescos, plateados y relucientes disipadores, son unos de los módulos de memoria más llamativos que hemos tenido en nuestros laboratorios.

En este closeup al sticker de especificaciones podemos ver el modelo (PC2 9600) y abajo Flex XLC Series, a un costado tenemos las latencias a las que funcionan a su frecuencia de trabajo (1200Mhz) que son de 5-5-5 a un voltaje de (redoble de tambores) 2.1volts. Sí, solamente 2.1v para lograr 1200Mhz, algo que con otros chips solamente se podía alcanzar con la ayuda de más voltaje.

Un acercamiento al sistema XLC, de diseño propiedad de OCZ; por los niples podremos conectar las mangueras de entrada y salida de nuestro Watercooling, para de esa manera asegurar una temperatura de operación bajísima (aunque no son imprescindibles: a 1333Mhz y 2.3v las memorias se entibiaban pero no llegaban a calentarse mucho, como pasaba con los antiguos módulos DDR chip BH5 al usarlos a 3.5v o más).
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